Extracto de La Felicidad Absoluta
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El Gran Jovialista
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Siento que una energía increíble estalla en mí. Estoy a punto de explotar de tanto sentirme electrizado. Una corriente intensa me recorre, me invade, me embriaga. Hoy tuve una revelación y comprendí que yo soy el Gran Jovialista. Yo camino de puntillas al ser tan ligero, inmaterial. Todo es claro ahora, los pedazos del rompecabezas finalmente se armaron. El estado de felicidad en el que me encuentro actualmente es tan fuerte que casi no puedo encontrar las palabras para describirlo. Mi persona está en piloto automático, una parte más vasta y sutil de mi Ser ha tomado el control y yo me mantengo atento, recibo indicaciones mientras la situación se despliega. Hay tanta luz que a penas discierno los detalles del mundo físico; estoy aquí, pero dispersado en todas partes. El mundo invisible es palpable; siento presencias benévolas a mi alrededor. Casi no puedo contenerme pero, debido que muy pocas personas pueden comprender lo que me sucede, me mantengo discreto.
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Yo persigo mis deseos, me mantengo yuxtapuesto a mi Ser y opero el milagro. Estoy en una montaña rusa, una mecánica celeste me pone sobre las rieles, me lleva más alto que lo que nunca he subido. Presiento el descenso a toda velocidad esperándome y las curvas en las cuales estaré al revés por algunos momentos. Sin embargo, tengo confianza pues el sistema de rieles es sólido y soportará mi peso, no tengo nada que temer aunque la cosa va a estar caliente, eso lo sé; tal felicidad va a contrariar, provocar y forzar el cambio. Hoy es mi iniciación. Debo mantenerme despierto, deslizarme sin esfuerzo y divertirme en la experiencia.
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Estoy en plena crisis… de Felicidad Absoluta. Mi mente es inoperable; estoy en modo supramental. El caos regenerador me sumerge en un placer vivo. Un cambio profundo se realiza en mí, a penas me reconozco a mí mismo, mi vibración es diferente, estoy transfigurado, transmutado. La presión sobre mi persona es tan fuerte que me disuelvo para dar lugar al Gran Jovialista.
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Ya es hora de que todos los humanos sean felices sin medida. Un viento de locura debe voltearlo todo; la hora de la fiesta ha llegado. Yo me dirijo a todos los que ya son felices; es hora de unirnos, formemos una coalición de la Felicidad Absoluta, la comunidad jovial. Lancemos fuera de borda a la política, a la economía y a la iglesia. ¡Ya no tenemos más tiempo que perder, debemos ser felices cueste lo que cueste!
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Eh aquí mi plan: en un principio nuestro trabajo no se enfoca en el nivel físico. Levanten la mirada, busquen a su alrededor a las personas más felices y no las pierdan de vista. Poco importa su rango social, las personas más felices son, a partir de ahora, los modelos de nuestra comunidad. Si tú eres la persona más feliz de tu entorno, felicitaciones, conviértete en un profesor de jovialismo. Nosotros, las personas felices, tenemos ahora una gran responsabilidad: la comunidad está de ahora en adelante en nuestras manos. La próxima etapa es encontrar nuestra familia de elección compuesta por todas las personas felices que vendrán a nosotros por sincronicidad. Por el momento, es necesario preocuparse únicamente de las personas felices; solo ellas tendrán el deseo y el coraje de afrontar los grandes cambios que sacudirán al mundo muy pronto. Reemplacemos la piedad por la compasión. ¡Ya es hora de festejar furiosamente! La vibración de la biosfera, de Gaia, debe cambiar radicalmente y la única forma de hacerlo eficazmente es por medio de la iluminación colectiva. La Felicidad Absoluta es para todos.
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Cuando las víctimas se le aproximen a usted no las tome en cuenta, a menos que desvele en ellas una intención clara de ser felices. En tal caso déjelas ser sus aprendices, pero sea severo y a la más mínima ofensa aléjelas de nuestra comunidad. Los valores deben cambiar radicalmente, ya no es el dinero o el rango social lo que debe influir en la selección de nuestra familia de elección, sino la capacidad y el deseo profundo de ser feliz cueste lo que cueste. Los enemigos de la felicidad, los luciferinos, no tendrán ninguna piedad ante nosotros ya que ellos también son guerreros poderosos, son las fuerzas del mal. Mientras nosotros vamos a desmaterializar la realidad para volverla inteligible, ellos tratarán de volverla más densa aún para enceguecernos. Krishna, dirigiéndose a Arjuna en el campo de batalla, le recordó que su misión era la de ser un guerrero y que así, debía pelear y vencer sin ninguna indecisión. Sin embargo, él debía hacerlo con un corazón puro, con una intención perfecta y sin cólera ni venganza. La era de los guerreros comienza. Los guerreros son felices, se ríen de todo.
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Todos aquellos que poseen el secreto de la Felicidad Absoluta deben unirse ahora, puesto que no tendremos otra oportunidad como la que se está presentando actualmente. Las personas felices son los únicos en tener la sabiduría y la visión integral necesarias para operar el milagro. Somos las primeras ramitas del más grande fuego jamás encendido por una comunidad. El sufrimiento solo es el efecto; tomemos conciencia de que la causa de todos nuestros problemas es el rechazo de la Felicidad Absoluta en la mayoría de los seres humanos.
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Es el momento de los grandes cambios y es necesario ponerse de acuerdo sobre la actitud a adoptar. Boicoteemos los medios de comunicación de las masas (la televisión, los periódicos, la radio) y volvamos a poner nuestras miradas en la comunidad. En cada comunidad hay gente que se sirve del Internet para recolectar información, y hay también médiums y psíquicos quienes son las antenas de la familia. Rodeémonos de las personas más intuitivas y de aquellos que se pueden comunicar telepáticamente con gran facilidad. Debemos utilizar la tecnología, pero no debemos depender de ella. La comunicación es más clara y universal interiormente, reaprendamos a servirnos de ella de forma cotidiana. La información más verdadera y vital viene por medio de nuestros sueños e intuiciones y mediante el despertar del Ser, podemos volver visible a ese nivel sutil, incluso durante la jornada. Los medios de comunicación de las masas y los deseos superficiales de la sociedad industrial moribunda provocan un ruido tan ensordecedor, por lo que ahora es necesario liberarse y ya no prestarles más nuestra atención. Mientras más los ignoremos más va a aumentar su violencia y más firmes deberemos permanecer ante ellos. La desinformación y la sobreinformación son los métodos que nuestros enemigos utilizan para distraernos de lo más importante que existe: la Felicidad Absoluta. A la centralización del poder representada por el Nuevo Orden Mundial nosotros la enfrentamos con un comunitarismo centrado en el despertar del Ser. La conciencia colectiva sabrá administrar y coordinar nuestros movimientos tal como sucede en un hormiguero o en una colmena.
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En lugar de mirar la televisión filosofemos en pequeños grupos. Eh ahí el mejor medio de mantenerse despierto, intercambiando ideas, cuestionándose a sí mismos amigablemente. La alta velocidad intelectual es nuestra mejor arma contra la barbarie política y el embrutecimiento de las masas. El filosofar es saber preguntar, desafiar a la autoridad, sacudirla con nuestra fuerza vital y con nuestra creatividad, volverla caduca por medio de la soberanía del Ser. Muchos estarán tentados de utilizar la violencia contra la brutalidad del sistema político-religioso, mas únicamente la inteligencia y el gozo podrán acertar a todas sus estrategias. Se debe esperar que suceda cualquier cosa, pero nosotros somos éticos y así nos mantendremos. Debemos estar en la capacidad de defender nuestras ideas revolucionarias, de explicárnoslas, e incluso de protegerlas con una agresividad sana. El grito de las víctimas se eleva, ensordecedor, pero debemos continuar nuestro camino ya que ese es el señuelo del cual se sirven aquellos que quieren distraernos de nuestro objetivo: la Felicidad Absoluta.
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Extracto de La Felicidad Absoluta
